Ensalada con palmitos, jitomates deshidratados y nueces

Hoy se me ocurrió una ensalada y quedó buena así que la comparto.

Lechuga (la que más les guste).
Palmitos (usé 1 lata).
Un puñado de nueces (de Castilla o pecanas).
Media taza de jitomates deshidratados (usé de los que vienen ya en aceite de oliva).
Vinagre (de preferencia alguno preparado, ya sea de vino tinto, con hierbas o este).
Aceite de oliva (mejor aún preparado).
3 o 4 huevos cocidos.

Se desinfecta la lechuga y se troza tamaño bocado (con las manos), se ponen las nueces en un plato hondo con un poco de vinagre y aceite y se dejan ahí hasta antes de servir la ensalada.
Rebanar los palmitos en rodajas y los jitomates en trozos más pequeños.
Mezclar el vinagre y el aceite para hacer una vinagreta.
Se mezcla todo y listo.

Lasaña (dos en una)

Esta receta tiene dos variantes. Es el resultado de la mezcla de tres cocinas: la de mi madre, la de Alex Meza y la mía. Excelente plato fuerte para disfrutarse acompañado de una ensalada.


Ingredientes para la versión sencilla:

- 250 g. de carne molida de res mezclada con 250 g. de carne molida de cerdo.
- 2 pimientos rojos grandes picados.
- 6 jitomates saladet picados.
- 3 ó 4 dientes de ajo medianos machacados.
- 1/4 de taza de cebolla finamente picada.
-  1 kg. de puré de tomate.
- Aceite de oliva.
- Comino (2 pizcas de comino entero o 1 cdta. de comino molido).
- 2 ramitas de albahaca fresca.
- 3 hojas de laurel.
- Orégano (a gusto, 3 pizcas apróx.).
- 1 caballito tequilero de salsa inglesa.
- Sal.
- 1 paquete de lasaña precocida (a mí me gusta la Panzani).
- Queso rallado (el que más les guste: parmesano, manchego o mozzarella).

En una olla se sofríen un poco 3 de los 4 ajos con aceite de oliva, se agrega la cebolla y se continúa sofriendo hasta que esté transparente. Se agregan los jitomates y luego los pimientos, un poco de orégano y unas pizcas de sal y se deja friendo para que sazone y se cueza. Ya que se haya reducido un poco el líquido que sueltan los jitomates y el pimiento se agrega un chorrito más de aceite de oliva y el puré de tomate. Se sube a medio fuego para que siga hirviendo, se agrega el laurel y la albahaca y se deja que hierva por unos 5 minutos (no olviden moverle y no poner el fuego muy alto para que no se queme). 

Ahora bien, pueden verter la salsa en la licuadora o usar una de esas pequeñas licuadoras manuales para darle uniformidad (asegúrense de sacar las hojas de laurel antes). Después de licuarla se regresa al fuego un rato más, se revisa el sazón y si hace falta se le agrega un poco más de sal (sin abusar).

En otra olla se pone a freír con aceite de oliva un diente de ajo machacado y se agrega la carne y el comino. Recuerden cocerla a temperatura alta y sin dejar de revolverla para que quede pareja. Ya que se ve cocida se agrega la salsa inglesa, un caballito de agua y un poco de sal y se deja cocer otro rato más. La carne debe quedar jugosa pero no con demasiado caldo.

Armar la lasaña es muy sencillo: se engrasa un refractario y se empieza con una capa de pasta (para que la pasta quede deliciosa, cada pieza se pasa por la salsa antes), una capa de carne, salsa y queso y así se repite hasta terminar con una capa de pasta, salsa y mucho queso.

Se hornea por 30 - 45 minutos a 150º y listo.


La variante de esta lasaña es muy rica también y se puede aplicar cuando se tengan más invitados. El twist es hacer lasaña de carne y espinacas con salsa bechamel

Los ingredientes principales son los mismos más:

- 1 kg. de espinacas cocidas.
- 1/2 taza de cebolla finamente picada.
- 1/2 barra de mantequilla.
- 3 cdas. de harina.
- Leche.
- Pimienta blanca.
- Sal.

Para hacer la salsa bechamel se pone a sofreír la cebolla en la mantequilla hasta que esté transparente, se va agregando el harina y se sigue friendo hasta que quede dorada (con mucho cuidado de no quemarla o se arruina, mantengan el fuego bajo) y se va agregando la leche, la sal y la pimienta blanca. Aquí empieza lo bueno porque se tiene que mover rápido para que no se hagan grumos. La cantidad de leche depende de qué tan espesa se ponga, nomás no la vayan a dejar acuosa ni como puré de papa jejeje.

Para armar esta variante se repite lo mismo que en la anterior sólo que la segunda capa es de espinacas con salsa bechamel encima y así se va montando hasta terminar.

¡Fin!

Pastel de zanahoria

Un postre que se puede hacer rápidamente ya sea como pastel o como panqués (molde grande o moldes individuales).


Ingredientes:

Pastel:
- 4 huevos.
- 1 1/2 tazas de aceite de maíz.
- 1 taza de azúcar.
- 2 tazas de harina.
- 2 cucharaditas de polvo para hornear.
- 1 cucharadita de canela.
- 1 cucharadita de sal.
- 2 tazas de zanahoria molida.
- 1 1/2 cucharadas de vainilla.

Betún:
- 2 paquetes de queso crema.
- 2 tazas de azúcar glass.
- 1 1/2 cucharadas de vainilla.
- 3 cucharadas de mantequilla o margarina.


Precalentar el horno a 200º C. Engrasar y enharinar el molde que se va a utilizar.

Pastel:
Se baten los huevos junto con el aceite y el azúcar, ya que la mezcla se ve homogénea se baja la velocidad y se va agregando el harina, el polvo para hornear y la sal.
En un recipiente aparte, se mezclan las zanahorias, la vainilla y la canela y se agrega a la mezcla anterior.

Se vierte en el molde y se hornea por 35 minutos (o hasta que al insertar un palillo este salga limpio).

Betún:
Batir el queso crema hasta que esté suave, agregar la vainilla y la mantequilla y después ir agregando poco a poco el azúcar glass.

Ya que el pastel se haya enfriado, cubrirlo con el betún y listo ¡Delicioso!

Champiñones Rellenos

Para esta receta vamos a necesitar:
Champiñones de buen tamaño, hay que elegirlos cerrados (es decir que cuando los veas por la parte de abajo el pie y el capuchón se vean unidos), unas lonchas de tocino ahumado, cebolla, ajo, queso parmesano (del mejor que sus bolsillos permita, hay unos tipo parmesano uruguayos que hacen el trabajo y no son caros), sal y pimienta.


Para empezar, lavamos bien los champis y les quitamos el pie, mientras ponemos en un sartén a dorar el tocino. En lo que se va dorando el tocino, picamos finamente los pies, tiene que ir picadito muy pequeñito pues sino, pueden quedar un tanto duros ya que es la parte mas fibrosa del hongo. Ya que está dorado el tocino lo sacamos del sartén, y si ven que hay mucha grasita quiten un poco, pero no toda pues la usaremos para freír la cebolla y el ajo, también finamente picados, ya que están transparentes la cebolla y el ajo, le ponemos los pies de los champis y cocinamos hasta que queden suaves. Es importante salpimentar al último momento para que el hongo no suelte tanta agua, cuando este paso está listo, le ponemos el tocino picadito, también en el último momento para que no pierda lo crujiente con la humedad del preparado, finalmente le ponemos el queso parmesano (si no tienen pueden usar manchego, gouda, gruyere o cualquier otro que derrita y gratine) y, como siempre lo digo, ¡pruébenlo! Tiene que estar ligeramente salado para que al final de la receta se equilibren los sabores. Si gustan, también pueden agregar nuez moscada o alguna otra especia que se les antoje.

Teniendo el relleno preparado, tomamos los capuchones y los salpimentamos, importante hacerlo también a último momento para que no pierdan líquido, se rellenan y se les pone mas queso parmesano rallado por encima, se terminan con un chorrito de buen aceite de oliva extra virgen por encima y al horno. Éste tiene que estar a temperatura media para que se cocine el champiñón sin quemarse y para que el queso gratine, cuando esto sucede... ¡¡Listo!! ¡Ya tienen champiñones rellenos!
Si quieren pueden usar un hornito eléctrico para gratinarlos, también quedan muy bien! = )

Dip de tomate y albahaca

Para preparar este dip vamos a necesitar un manojo de albahaca fresca, un bote de 250 ml de crema, una barra de 190 grs de queso crema, tomates deshidratados (los venden en frascos de conserva con aceite de olivo, muy sabrosos) un diente de ajo, sal y pimienta.
Para hacerlo vamos a poner la albahaca ya desinfectada en un procesador, el diente de ajo y los tomates, molemos un poco hasta que las hojas queden pequeñas, le agregamos la barra de queso y la crema, terminamos de procesarlo hasta que quede terso, salpimentamos y listo!!
Como recomendación, prueben el sabor y la sazón, también si quieren pueden poner un poco del aceite donde vienen los tomates, le va a dar mas sabor y ligereza a la consistencia.

Dip de Nabo

Compartiendo mi primera Receta con Glamour como sous cheff (mejor dicho, cocinero adjunto)

De nuevo, todo es al tanteo y depende del tamaño del nabo, de lo fuerte en sabor que lo quieran y demás detalles.
Es muy sencillo en realidad, necesitan un nabo (primo del rabano para los que no lo conocen) un poco de crema y/o yogurt natural, los sazonadores de su preferencia y cebollin para adornar.
Para empezar cortamos el nabo pequeñito, esto nos ayudará cuando haya que procesarlo, se mezcla con la crema y/o el yogurt (depende que tan light lo quieran y de qué tan acidito les guste el dip) se sazona bien con sal y pimienta (recomiendo pimienta blanca para que no queden puntitos negros al terminar la receta y sal de mar porque le da un sabor ligeramente diferente y resulta mas sabroso) se procesa todo con un mixer (o licuadora) hasta que quede terso, se rectifica el sazón, se adorna con el cebollin cortado fino y listo!!
Si así lo prefieren también queda muy bueno usando queso crema (philadelphia)

Mi consejo para esta receta es que piensen para qué tipo de papa o totopo lo van a usar, para algunas papas resulta mejor un sabor cremoso, si usan pan pita conviene el yogurt (para continuar con el estilo del medio oriente) y si lo que van a usar son totopos el queso es la opción. Así mismo, durante la preparación vayan probando y si lo prefieren, agreguen lo que crean que puede funcionar con el sabor.

¡Viva el Tinto!

Con el frío que se soltó en el DF (y sí, obviamente, en otras partes del mundo y de la república mexicana...) se antoja tomar algo que caliente el cuerpecito desde dentro (sin albur), así que acá va una receta perfecta para eso.

Navegao (receta cortesía del Principito y de un chileno llamado Oscar)

Se vierte en una olla la botella de vino tinto de su preferencia (nomás no vayan a usar el vino carísimo del que sólo quedan 3 botellas en el mundo, con uno económico y rico basta y sobra) y se agrega 1 taza de azúcar. Se revuelve hasta que el azúcar se disuelva. En una redecilla, saquito o pañuelo; se ponen 2 ramas de canela, unos 5 clavos de olor y si se quiere, un poco de jengibre, se cierra y se mete para que hierva junto con el vino por un buen rato. Después se agrega una naranja en rodajas y se deja reposar para que todo quede bien impregnado.