¡Viva el Tinto!

Con el frío que se soltó en el DF (y sí, obviamente, en otras partes del mundo y de la república mexicana...) se antoja tomar algo que caliente el cuerpecito desde dentro (sin albur), así que acá va una receta perfecta para eso.

Navegao (receta cortesía del Principito y de un chileno llamado Oscar)

Se vierte en una olla la botella de vino tinto de su preferencia (nomás no vayan a usar el vino carísimo del que sólo quedan 3 botellas en el mundo, con uno económico y rico basta y sobra) y se agrega 1 taza de azúcar. Se revuelve hasta que el azúcar se disuelva. En una redecilla, saquito o pañuelo; se ponen 2 ramas de canela, unos 5 clavos de olor y si se quiere, un poco de jengibre, se cierra y se mete para que hierva junto con el vino por un buen rato. Después se agrega una naranja en rodajas y se deja reposar para que todo quede bien impregnado.